¡¡¡Feliz año atrasado!!!

Madre mía, a estas alturas y deseándoos un feliz año... Pero bueno, más vale tarde que nunca, no?? Además, ¡¡nunca están demás los buenos deseos!!

¿Qué tal habéis pasado las Navidades? Nosotros muy bien, los niños han disfrutado una barbaridad y yo no he parado con ellos... Aunque ahora necesito unas vacaciones de las vacaciones, :P

Bueno, ¡¡a lo que íbamos!! ¡¡El primer post del año!!! Os traigo una tarta con sus galletas que hice justo antes de las navidades para el novio de una buena amiga... Quería darle una sorpresa a su futuro esposo, e intentamos buscar algo original que le hiciera ilusión. Y entre las ideas que me dio, estaba la de hacerle la tarta y las galletas de un juego que le encanta, "Clash of Clans". Y aunque al principio me asusté un montón cuando me lo dijo, ¡¡al final quedó chulísimo!!!

Como era un juego con un montón de personajes y además mi amiga quería que utilizara la construcción de su novio, tras mucho comerme la cabeza, decidí probar el papel de azúcar comestible... ¡Y es una solución estupenda para todos aquello que queráis decorar dulces pero no os atrevéis con el fondant o la glasa!

Además, es súper cómodo, lo encargas por internet (yo lo hice en Fotopastel) y en un par de día lo tienes en casa. Y para pegarlo, comodísimo. Yo forré la tarta y las galletas primero con fondant y luego pegué el papel comestible con Karo (o golden syrup), pero en realidad podéis usar mermelada, pegamento comestible o cualquier otra cosa que actúe como pegamento.

Para las galletas, recorté el papel de azúcar con una troqueladora (se corta facilísimo, podéis utilizar tijeras, troqueladoras, cutter...) y las puse sobre el fondant. Los detalles de los marcadores de vida y potencia los hice con rotulador comestible.

Y para la tarta, como os acabo de decir, la forré con fondant, pegué el papel comestible y la decoré con detallitos acordes con el juego. Le hice unos arbolitos, una cascada, unas rocas y una escalera de asalto...

¿Qué os parece? Y como estamos en año nuevo y los Reyes acaban de pasar... ¡¡os dejo la receta del bizcocho!! Hice un bizcocho de chocolate blanco relleno de Nutella... Uhmmmmm.... Aunque la receta es con Thermomix, podéis hacerla a mano, de hecho, esta vez yo lo hice a mano porque tenía mi Thermo indispuesta, ¡¡jajaja!!

Bizcocho de chocolate blanco

Ingredientes

4 huevos
200 grs. de azúcar
1 tableta de chocolate blanco: mejor si es de 100grs, porque no da demasiado sabor.
100 grs. de mantequilla
1 yogur natural
200 grs. de harina
1 sobre de lavadura Royal

 

Preparación 

- Precalentar el horno a 180º .

- Poner los huevos y el azúcar en el vaso, programar 3 minutos, 37º, velocidad 5, para que queden esponjosos (si no tenéis Thermomix, sin problema, lo hacéis con una batidora sin temperatura, que no pasa nada y sale igual de bueno!).

- Añadir el chocolate y la mantequilla y batir 3 minutos, velocidad 5 (para hacerlo sin Thermo, mejor si derretís un poco la mantequilla y el chocolate blanco antes).

- Echar el yogur y mezclar 10 segundos, velocidad 5 .

- Incorporar la harina y la levadura y mezclar 15 segundos, velocidad 3 (este paso, para hacerlo sin Thermo, utilizad una espátula, es mejor si lo hacéis a mano, con movimientos envolventes y sin mucho meneo). Terminar de mezclar con la espátula.

- Engrasar un molde con mantequilla (o aceite o preparado antiadherente), verter la mezcla y hornear durante 45 minutos, aproximadamente.

Es uno de los bizcochos más esponjosos que he probado y está buenísimo, y a pesar de ser esponjoso, aguanta muy bien el peso del fondant. Espero que lo hagáis, ¡¡porque es facilísimo!!

Para entregar las galletas, las envolví en bolsitas de papel celofán y las cerré con un lazo verde.

Por cierto, ahora que he vuelto a retomar el blog, os vais a preparar, porque tengo en cola varios dulces que he hecho, unos cuantos que tengo que hacer y muchísimos que quiero probar.

¡¡¡Muchas gracias por estar ahí de nuevo y mil dulces besos!!!

P.D. Quería dedicarle este post a mi suegri, porque es única dando ánimos, porque confía en mi una auténtica barbaridad y porque desde que me conoce (hace muchísimos años ya...) me ha tratado como una hija. ¡¡Que te quiero mucho suegri!!